Desde mediados de marzo, cuando casi medio mundo se paró por el Covid-19, estamos en la cuerda floja. Entre el Erte que tardamos 2 meses y medio en cobrar y las empresas que han cerrado, tienen que cerrar o reducir plantillas, el tema laboral es una oscura y completa incógnita. ¿Voy a ser de las que van a despedir, de las que van a reducir las horas? Mi empresa no suelta prenda, así que he decidido presentarme para un trabajo taper sex.
Me he informado mucho y creo que tiene muy buena proyección. Ser asesora de la maleta juguetona tiene muchas ventajas, uno de las más importantes para mi es que puedes organizar tus horarios como quieres. Con un trabajo taper sex puedes ganar lo que te propongas ganar, ya que todo depende de ti. Puedes formar un equipo o puedes trabajar sola. Tienes mucha libertad y puedes trabajar según tus propios criterios, siempre y cuando cumplas los objetivos, claro.
Además en un trabajo taper sex estás vendiendo felicidad, sueño, placer, amor, y vas a conocer personas que te van a confiar sus más íntimos deseos. Y esto, quizás, sea lo que más me motive para empezar esta nueva aventura.
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