
Me presento, me llamo Maria Victoria, Marivi para todos los que me conocen. Tengo la gran suerte de tener una actividad laboral maravillosa, tengo un trabajo tupper sex. Ya lo voy desarrollando desde hace 7 años y cada día me gusta más. Para desempeñar este trabajo, hace falta tener mucha intuición, ser observadora, con psicología, mucho sentido del humor y más que nada en el mundo tener grandes dosis de empatía.
Desde el minuto uno, supe que este trabajo tupper sex era lo mío. Lo descubrí un poco por casualidad, por una prima mía que estaba en este tipo de empresa, aunque no la mía.No tuve la menor duda. Y además, aparte del aspecto maravilloso del desarrollo de mi trabajo con los clientes, está el aspecto económico. Si te sabes mover, se puede llegar a ganar mucho dinero.
El trabajo tupper sex te permite además ayudar a las personas a ser más felices. Se trata de darles la oportunidad de explorar la sexualidad y hacer que con tu ayuda y consejos, y los artículos que se llevan, puedan vivir plenamente su vida sexual. Sentirse realizadas como personas y como mujeres. La verdad es que no me arrepiento de mi elección, mi trabajo me encanta.